Las fugas en las piscinas pueden ser un problema frustrante para cualquier propietario, ya que provocan pérdida de agua y posibles daños si no se solucionan a tiempo. Identificar y reparar estas fugas es fundamental para mantener el buen funcionamiento y la integridad de su piscina. En esta guía, analizaremos las fugas más comunes, sus causas y las soluciones eficaces para corregirlas.
Señales y detección comunes de fugas en piscinas
- Pérdida de agua: Controle regularmente el nivel del agua de su piscina. Un descenso repentino indica una posible fuga.
- Grietas o daños: Inspeccione la superficie de la piscina, incluyendo azulejos y revestimientos, en busca de grietas visibles o desgaste que puedan estar causando fugas.
- Bomba funcionando constantemente: Si su bomba parece estar funcionando continuamente, podría indicar una fuga en el sistema.
Las fugas en piscinas suelen ser difíciles de detectar, sobre todo si están bajo tierra o dentro de las tuberías. Considere la posibilidad de contratar un servicio profesional de detección de fugas para localizar con precisión el origen de la fuga mediante equipos especializados como cámaras y pruebas de presión.
Reparación de fugas en piscinas
- Parche para revestimiento de piscina: Para pequeños desgarros o pinchazos en el revestimiento de la piscina, aplicar un parche utilizando un kit de reparación puede sellar eficazmente la fuga.
- Reparación de grietas: Repare las grietas en la superficie de la piscina de inmediato para evitar filtraciones de agua. Para ello, se suelen utilizar selladores epoxi o impermeables.
- Fuga en la plomería: Si la fuga proviene del sistema de plomería, puede ser necesaria la intervención de un profesional. Un plomero calificado puede reparar o reemplazar las tuberías dañadas.